Las Brigadas Al-Qassam, brazo armado de Hamás, secuestraron, torturaron y asesinaron a Odai al-Rabei, de 22 años de edad.

El gazatí fue señalado de traición por participar en protestas contra Hamás, mientras que la familia del joven acusó que este fue arrastrado y torturado hasta la muerte con diversas herramientas en un hecho injusto.

En el funeral de Rabei su familia pidió “mano de hierro” contra los responsables y prometieron venganza.

Odai ayunaba durante el Ramadán, rezaba y leía el Corán. Hacemos un llamado a todas las organizaciones e instituciones de derechos humanos para que apoyen al pueblo de Gaza contra estos criminales”, señalaron.

Un conocido de Rabei atribuyó el asesinato de este al “precio a pagar para quienes dicen no a la regla de la milicia”.

Vergüenza para el movimiento que ha estado oprimiendo a un pueblo hambriento, desplazado y solitario durante año y medio”, refirió.

En redes sociales, leales a Hamás aseguraron que “la resistencia no mata a nadie sin motivo” y que actúa contra “sionistas y traidores”.

Inclusive señalaron a Rabei de fungir como espía y agente.

Gracias a él muchos murieron como mártires debido a la información que dio a los sionistas”, indicó un comentario.

LÓPEZ-DÓRIGA